Cultura
La instalación con biotextiles que representará a Chile en la Bienal de Diseño de Londres
Falta menos de un mes para que empiece la cuarta edición de la Bienal de Diseño de Londres, que se hará en el Somerset House entre el 1 y el 25 de junio, y que contará con la participación de más de 25 países. Chile estará presente con el pabellón Borrowed Matter/Materia prestada, una instalación en la que, a través de siete piezas textiles hechas con un nuevo formato de celulosa, se irán revelando mensajes mientras se van degradando. La instalación está a cargo de Sofía Guridi, diseñadora especializada en textiles inteligentes (smart textiles) e investigadora en el Centro de Bioinnovación de la Universidad de Aalto, en Finlandia, junto al gestor cultural y curador Juan Pablo Vergara.
Después de estudiar diseño en la Universidad Católica, Sofía empezó a explorar el textil como soporte, unido a nuevas tecnologías digitales. Luego, estudió un MA en Diseño Contemporáneo en la Universidad de Aalto, en Finlandia, donde ahora está cursando su doctorado. “En mi familia siempre hubo una apreciación muy alta por la artesanía textil, sus historias y técnicas”, cuenta Sofía. “Con el tiempo fui descubriendo que al sumarle tecnologías digitales y nuevos materiales, se abrían posibilidades increíbles de explorar aún más su potencial comunicacional, funcional y estético. Me motiva además pensar que el tejido es una de las técnicas más antiguas que existen, y aún hay mucho por describir y aprender”.
La cooperación es también el tema central de esta Bienal, bajo el título The Global Game: Remapping Collaboration. El foco es invitar a imaginar y presentar nuevas formas de cooperación internacional a través del diseño como medio. “Materia prestada nace orgánicamente de mi vínculo personal entre Chile y Finlandia, que se cruza con un vínculo industrial en crecimiento. De esta manera, el pabellón expone esta relación a través de la materialidad y la técnica. Esperamos que la instalación inspire al público a pensar cómo estas relaciones crecen en el futuro, nutriéndose de perspectivas muy distintas basadas en contextos muy lejanos entre sí, con diferentes recursos y problemáticas”, explica la diseñadora.
La experiencia sensorial está dada a través del tacto, los colores, las texturas y los sonidos que se relevan a través de sensores touch creados al integrar hilos conductores en los textiles. “Queremos envolver al público en un espacio de calma, para que se conecten con el bosque y sientan la importancia del proceso de diseño lento y consciente”, cuenta el curador Juan Pablo Vergara.